jueves, 3 de abril de 2014

¿Por qué no?

 ¿Por qué no? En serio ¿Pero por qué diablos no? Voy a tomar hoy esta determinación, y algún día, dentro de mucho tiempo la voy a llevar a cabo: Escribiré un texto positivo y lleno de felicidad para este blog.
Unas lineas que no representen un grito, ni tampoco un susurro, pero que sobretodo no sean agónicas, que tenga palabras bonitas, y no necesite si quiera de la esperanza porque está ya no sea necesaria.
Es cierto que dependo de mi inspiración que solo llega en momentos difíciles, y también que el alma del ser humano no necesita expresar con tanta desesperación la felicidad como la tristeza, pues el desahogo no es tan necesario, y normalmente, la felicidad tienes con quien compartirla; se exterioriza con naturalidad y sin palabras.
Sí, algún día llegaré y escribiré algo hermoso, y el nombre del blog no se corresponderá en absoluto con la temática de los textos, puede que trate sobre amistad, o sobre la familia, puede que sea amor... Todo dependerá de aquellos que estén dispuestos a ofrecerme su compañía, a mis familiares que me den apoyo, o a las mujeres que me ofrezcan su corazón.


Realmente, si tan solo escuchara una frase que ansío, sería todo mucho más sencillo.