¿Por qué no? En serio ¿Pero por qué
diablos no? Voy a tomar hoy esta determinación, y algún día,
dentro de mucho tiempo la voy a llevar a cabo: Escribiré un texto
positivo y lleno de felicidad para este blog.
Unas lineas que no representen un
grito, ni tampoco un susurro, pero que sobretodo no sean agónicas,
que tenga palabras bonitas, y no necesite si quiera de la esperanza
porque está ya no sea necesaria.
Es cierto que dependo de mi
inspiración que solo llega en momentos difíciles, y también que el
alma del ser humano no necesita expresar con tanta desesperación la
felicidad como la tristeza, pues el desahogo no es tan necesario, y
normalmente, la felicidad tienes con quien compartirla; se
exterioriza con naturalidad y sin palabras.
Sí, algún día llegaré y escribiré
algo hermoso, y el nombre del blog no se corresponderá en absoluto
con la temática de los textos, puede que trate sobre amistad, o
sobre la familia, puede que sea amor... Todo dependerá de aquellos
que estén dispuestos a ofrecerme su compañía, a mis familiares que
me den apoyo, o a las mujeres que me ofrezcan su corazón.
Realmente, si tan solo escuchara una
frase que ansío, sería todo mucho más sencillo.